Las garrapatas son un insecto parásito bastante usual. Estas poseen una predilección por los animales con cabello. De ahí que, nuestras mascotas son las más afectadas. Aunque también pueden perjudicar la salud de toda la familia en el hogar. No en vano se alimentan de la sangre y tras la picadura transmiten patologías de distinta gravedad.
Estos insectos tienen gran preferencia por los lugares con humedad. Si en tu patio se acumulan objetos o desperdicios orgánicos, los sitios de esta clase son ideales para que dichos insectos permanezcan. Seguidamente, cambiarán de posición hasta que se topen con un huésped viable. Por ello, antes de fumigar garrapatas necesitas ejecutar ciertas medidas.
- Corta el césped.
- Retira la maleza y hojas caídas.
- Borra las regiones de sombra, al podar los árboles.
- Efectúa una buena limpieza del parking.
- Desecha los residuos orgánicos como madera y césped en bolsas herméticas.
- Limpia las camas y habitaciones, ya que las pulgas tienen enorme capacidad para brincar y llegar a estas zonas.
Tras esta limpieza, es viable implementar un producto para acabar las garrapatas. En el mercado es posible hallar variedad que están formulados con sustancias químicas que resultan tóxicas para las garrapatas, sus huevos y las ninfas.
Entre los más comunes encontrarás aerosoles contra garrapatas. Vienen en una botella, cuya boquilla a modo de atomizador, permite que sea rociado en el suelo y los muros. Otros son los limpiasuelos insecticidas, el cual es un producto apto para limpiar los suelos de las casas.
También encontrarás los repelentes de insectos para ropa, en caso de que te enfrentes a una infestación interna. De igual manera, existen los dispositivos de ultrasonido, un artefacto electrónico que emite una frecuencia de ruido desagradable para los insectos. Si la plaga es incontrolable, tendremos que acudir a SASI, una empresa de fumigación de Rosario.
